sábado, 29 de octubre de 2005

El debate entre Darwin y Moisés

Nuevamente algo que debiera ser una faceta secundaria (y personalmente creo que terciaria) del ser humano divide a nuestra especie. En EE.UU. vuelve a la polémica el tema de qué enseñar en las escuelas: la evolución o la creación. Obviamente hay grupos que tiran hacia ambos de la cuerda y quieren imponer su ideología a toda costa, hay todo tipo de intereses involucrados.

Pongámonos en el hipotético caso en que un bando demuestra su veracidad y destruye las ideas del otro.

Si uno de estos días (quizás el juicio final) se aparece Dios frente a toda la humanidad y señala, "sí, yo creé el universo y todo su contenido", wow, sí que sería un espectáculo con amplio rating en todo el mundo, más que cualquier culebrón latino. Todo lo que se enseña en las universidades quedaría en tela de juicio, especialemente en el área de paleontología. Cualquier científico se volvería loco cuando quedara resuelto el famoso dilema sobre el huevo y la gallina. De cualquier manera todo esto no importaría mucho, ya que el dios vengativo y colérico de la cultura judeo-cristiana destruiría a la mayor parte de la humanidad en el fuego del infierno, jejeje.

Por el contrario, si la tecnología avanza de sobremanera y demuestra al fin que todos venimos de un racimo de proteínas, pues, el 90% de la humanidad quedaría en schock y rápidamente la sociedad colapsaría. Todo el arte, la caridad, las guerras, los negocios impulsados por los distintos credos religiosos habrían sido surgido gracias a la imaginación de alguien, muy buena imaginación, por cierto.

O el peor de los escenarios, que ridiculizaría a ambas posturas, sería la visita (o invasión) de seres provenientes de otros planetas, quienes señalaran: "Nosotros los creamos con avanzados métodos de ingeniería química y genética, no son más que el resultado positivo de un experimento que comenzamos hace millones de años". O sea, hubo evolución y a la vez no hubo dios pero sí creación inteligente. Eso sí que justificaría una visita al psiquiatra.

Estoy seguro de que, a causa del párrafo anterior, más de alguien me va a decir que he visto mucha TV, pero ¿las ideologías no son acaso pensamientos de personas que leían mucho, o que en la antigüedad escuchaba muchas historias? ¿Quién podría demostrarme la veracidad de todos los relatos de los libros sagrados y científicos de la humanidad?

A mí EE.UU. no me vende la pomada de que en oriente medio se impone la dictadura religiosa mientras su país disfruta de las libertades "democráticas". Por lo que veo, el fundamentalismo no discrimina entre los dioses del hombre, ya sea si usa turbante o un traje de marca.

Lo mejor, en el caso de las escuelas, sería que presentaran ambas teorías (creacionista y evolucionista), en asignaturas separadas, y dejar que los mismos estudiantes resuelvan si favorecen una opción o la otra. Mal que mal, en este mundo hay muchos caminos, y afortunadamente no todos llevan al mismo lugar.

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